19/12/2010

domingo, 26 de diciembre de 2010

Untitled


Como explicarte lo que es el amor, si nunca te pusiste a bailar.
Como explicarte lo que es el cariño, si nunca sentiste la caricia del dolor por el esfuerzo o si nunca bailaste en grupo.
Como explicarte lo que es la vida, si nunca BAILASTE!
Ganar es aprender, divertirse y superarse en grupo.
Esto “es” danza, ni mas, ni menos.
Pero ES una GRAN PARTE de MI vida

He estado allí... Otra vez.

Volví, tube que hacerlo pero necesitaba no estar sola... habrá que repetirlo.
Poder decir que ya viví eso.

jueves, 23 de diciembre de 2010

Ponte guapa y disfruta, que la noche es corta … morena.


Tu ego, admítelo, es más te obligo, por así decirlo, que admitas que es lo único que te importa, junto a tus tacones, tus vicios y la imagen que la gente tenga de ti. Para ti que más da el daño que puedas causar, ver sufrir a la gente que se supone que quieres todo por tus problemas: “Lo prioritario aquí soy yo.” Tu orgullo sigue y continúa creciendo pero eso a la gente no le importa y se hartan de ti, siempre pasa lo mismo, cuando piensas que a ti nunca te pasaría eso … dicho y echo.
Juguemos, pongámonos en la piel de una de esas personas que sufren, digamos que en la piel de la primera persona que se harta de ti, que te abre los ojos con la única manera que se puede, haciéndote llorar para que veas como se sienten los demás.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Te Quiero ♥

Imposible, improbable, posible… ¿quién sabe?

Bueno, a ver a lo mejor puede ser muy improbable retroceder en el tiempo físicamente pero imaginen que le sucede algo que jamás habrían pensado y luego por circunstancias, no sé si de la vida o del destino, unos años más tarde aunque con tantos años como arrugas de más, tienes la sensación de que todo vuelve a suceder:
el mismo día del mismo mes y la misma lluvia, aproximadamente la misma hora en el mismo parque y el mismo banco con el que se vuelve a formar el mismo charco que hace la misma mancha en los mismos pantalones, con ello, el mismo sentimiento tras la misma costumbre de acariciar sus labios y dejar escapar el mismo beso.

Ese mismo beso, que puede cambiar el mundo si tú quieres, con el que se resume un te quiero a un simple silencio seguido de una mirada pidiendo otro, pero, otro beso que no acabe nunca, porque te recuerda a quien de verdad lucha por ti, a quien te ha dado una oportunidad, a quien te cuida, a quien te abraza, a quien te a dado el cariño que necesitas, a quien te apoya, a quien te acompaña a mirar las estrellas, a quien siempre te da las gracias, a quien te quiere…

domingo, 19 de diciembre de 2010

Doña Felicidad & Su Apéndice



Mi Cuarto Menguante

Porque tú también engañas, sólo tu sabes a lo que me refiero.
Te quiero, idiota.

Ponte guapa y disfruta... que la noche es corta, morena.


Tu ego, admítelo, es más te obligo, por así decirlo, que admitas que es lo único que te importa, junto a tus tacones, tus vicios y la imagen que la gente tenga de ti. Para ti que más da el daño que puedas causar, ver sufrir a la gente que se supone que quieres todo por tus problemas: “Lo prioritario aquí soy yo.” Tu orgullo sigue y continúa creciendo pero eso a la gente no le importa y se hartan de ti, siempre pasa lo mismo, cuando piensas que a ti nunca te pasaría eso … dicho y echo.
Juguemos, pongámonos en la piel de una de esas personas que sufren, digamos que en la piel de la primera persona que se harta de ti, que te abre los ojos con la única manera que se puede, haciéndote llorar para que veas como se sienten los demás.

Volver a sentir eso.


Volver a sentir eso, algo que sólo unos poco sabemos lo que significa cuando te sientas en cualquier sitio a cambiarte de zapatillas, a decir: “Hoy me sale”. Con la cantidad de decisión adecuada como superar la de la última pero no lo suficiente como para decepcionarte o rendirte si luego te hace falta algo más de esfuerzo aunque te parezca imposible.
Volver a sentir el dolor de muchas horas de ensayo sintiéndote orgullosa de ti misma por el esfuerzo que estás realizando para conseguir lo que más quieres, que en esos momentos no piensas en otra cosa que no sea todo eso.
Volver a sentir que los ojos se te inundan de lagrimas cuando escuchas un: “Bailamos”. Y necesitar gritarlo porque pensabas que nada iba a poder salir mejor, seguido de: “Soy feliz”, que se te escapa entre los labios, como un susurro.
Volver a sentir un cosquilleo en el estómago mientras estás entre bambalinas a unos pasos del escenario distanciados por los segundos que te quedan para avanzar y pisarlo una vez más con tu mejor sonrisa y lo más importante: tu ilusión.
Volver a sentir que el estrés te invade el cuerpo porque tienes el tiempo justo para cambiarte entre canción y canción y volver a maquillarte mientras continuas gritando: “Mucha mierda, chicas”.
Volver a sentir esa sonrisa tonta al salir los camerinos más feliz que nunca con la mochila llena de ropa y otro recuerdo inolvidable más que añadir a la lista, que todo el mundo esté esperando fuera para decirte: “Has estado genial”, aunque te hayas equivocado es lo mejor que te puede pasar.
A todos aquellos que me apoyan porque saben todo lo que significa para mi volver a sentir eso:
GRACIAS